sábado, 7 de noviembre de 2009
Esta es una historia para ellas, las niñas que no conocen otro mundo que su cajita de cristal perfecta, y piensan que todo gira en torno a ellas. Que con solo decir "a" ya tienen todo lo que desean. Pero hay otro mundo muy distinto a ellas, con pequeñas de su edad que tienen que hacer lo imposible para ganar unos pesos. Que tienen que demigrarse y maltratarse porque no tienen otra forma de subsistir. Son esas niñas que ellas miran con odio y rabia, y con cierta indiferencia al pasar. Ellas miran a esa chica, que es igual que ellas, pero no tiene lo material que las afortunadas pueden poseer.
A esa qe dice la gente que es una vulgar, la tachan de indecente por la vida que se tiene que dar, que no es ningún lujo, y menos orgullo, para ella;
Una noche se maquilla - por primera vez- aparentando diez años más, viste con provocacion, con un poco más de ropa con la que su madre trajo al mundo. Su vitrina es una esquina y espera un comprador. Así la pasa diario ahora. Su rutina se volvió recibir dinero a cambio; a cambio de lo que nunca se hubiese imaginado que tendría que hacer. Ella prefiere volver a su casa, y jugar con sus muñecas como todas las otras niñas de su edad, pero en cambio, debe aparentar otra edad y hacer cosas que nunca conocería hasta dentro de unos años. De repente esta niña, crece precozmente, ya es una adolescente por fuera, pero por dentro, una pobre niña.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario