sábado, 7 de noviembre de 2009

No, no , no y no.. no es solo un vicio más, es otro disparador a la muerte, y si, aunque no lo quieras creer, o lo quieras ignorar, tarde o temprano termina culminando en un cáncer de pulmón, etc. Padezco el vicio, no lo digo orgullosa, y aunque sé que todavía puedo dejarlo, no lo hago, es un poco obvio por qué, no? Porque pese a que soy totalmente conciente de los daños y de las terribles consecuencias, el tabaco y la nicotina puede más.. in cre í ble! Pero cierto..
Después de viejos, todos bufan, todos se quejan que por qué no dejaron el cigarrillo, por qué no fueron más vivos, por qué no lo hicieron cuando aún estaban a tiempo; yo tengo la respuesta, porque a mi me pasa. Porque sinceramente, NO QUIEREN, prefieren seguir siendo manejados por un cigarro, que no lo voy a negar, es una dulce sensación, un dulce sabor (a mi me gusta, mi caso en particular,a otros no), ese primer cigarro que tiene un sabor distinto al de los demás, esa desconexión momentánea, y ese suave momento que solo tenés VOS y nada más que VOS y ese cilindro mortífero. Que paradoja, no querés que te mate pero aún así seguís abusando de él. Así es la vida, no querés cosas que tenés, pero aún aí las seguís queriendo. Creo que debemos tener más fuerza de voluntad para hacer algunas cosas, para dejar esos vicios, y si.. aún así, esta cabeza dura, no lo va a hacer!

No hay comentarios:

Publicar un comentario